El tercer, y último, día del Lollapalooza fue el que mejor clima tuvo, sin discusión. Una temperatura ideal y un día de puro sol nos esperaba para este hermoso cierre de jornada.
En los primeros horarios, abriendo este último día del evento, estuvieron artistas como las Fin del mundo provenientes de la Patagonia, Nenagenix dando un show bien rockero acompañada por su banda, Abril Olivera trayendo invitados muy especiales como lo son An Espil y Magamo (sus compañeros de banda en “Nafta”), y Fermín quien también tuvo un invitado muy particular en su show, Dillom.
En el Perry’s cantó Akrilla, una artista de trap chilena y, también, una de las más jóvenes en presentarse en este lineup. Tocó canciones muy movidas y extravagantes, pero antes de irse quiso compartir algunas otras un poco más melancólicas, obviamente sin dejar de lado su sello urbano tan característico en ella.
Al ratito, en el Alternative, se presentó la mexicana Ximena Sariñan. Nos contó que en Buenos Aires, a sus tan solo 20 años de edad, sacó su primer disco, por lo que le tiene mucho aprecio a esta ciudad y a su gente. Con su voz melodiosa y su actitud tan magnética atrajo a mucho público que la escuchaba mientras almorzaba. Anunció canciones nuevas, una de ellas “Nada”, un tema que pasa por distintas etapas y géneros musicales dentro de la misma; con vibras e influencias muy marcadas de los años 70s contrastadas por sonidos mucho más fuertes, acentuando aún más los graves del teclado, la guitarra y el bajo. Ximena, también fue invitada del Zar, quienes se presentaron después y la descosieron arriba del escenario con temas como “El momento perfecto” y “Superstar” que obviamente no podían faltar en su show.
Por primera vez en este horario de las 4 de la tarde el Perry’s explotó de gente para escuchar las canciones que mezclaba la genia de Anita B Queen. El público se dividía en quienes querían arrancar la tarde un poco más “chill” escuchando El zar y quienes venían con toda a bailar desde el momento 1. No cabe dudas que la energía de Anita contagió a todos los que llegaban y a los que ya estaban hacía rato en el predio, hasta los más chiquitos se bailaron todo.
El Flow se iba preparando de a poco para los shows que se venían más tarde y Dayglow salió a escena para brillar, como bien dice su nombre. Largaron un setlist repleto de canciones pegadizas que por más que no te las supieras no había forma de que la melodía no quedara dando vueltas en tu cabeza junto con alguna estrofa del tema. Además cantaron covers, entre ellos una parte de “There she goes” de The la ‘s, y nadie de los presentes pudo aguantar las ganas de cantar el estribillo con ellos.
Más tarde, en el escenario de al lado, estaba Jessie Reyez, que sinceramente fue de los grandes hallazgos de este día. Piel de gallina al escuchar sus interpretaciones y su voz tan especial y particular. Cantó “Good Guy”, su canción con Eminem y sus fans se volvieron locos. Al ver esto, la cantante bajó del escenario y compartió el micrófono con sus fanáticos para que la ayudaran a continuar la canción. También, durante su presentación, contó que ella es canadiense pero también colombiana por su familia; y creo que todos coincidimos en que tendría que sacar más música en español para sus seguidores hispanohablantes, ¡con un álbum entero nos conformamos!
Este último atardecer vino de la mano de Bandalos Chinos junto con la fiesta que se traían bajo la manga. En “Mi fiesta” las personas no paraban de bailar y cantar. La banda dió un show impecable, llevándose los últimos rayos de sol con ellos que se iban escondiendo poco a poco.
Pierce the veil trajo rock puro al domingo. Los estadounidenses lo dieron todo en su concierto, no dejaron nada por hacer, hasta subieron a una de sus fans al escenario para compartir con ellos un momento inolvidable.
La noche iba llegando y Hozier apareció para endulzar nuestros oídos con su voz. Escucharlo cantar tan cerca fue un lujo para todos los que tuvimos la oportunidad de estar en ese momento; sin mencionar además que estaba de cumpleaños, por lo que todo el show fue y se sintió incluso más especial de lo que pudo haber sido.
Llegaron las 8 de la noche y Thirty seconds to mars acaparó el escenario Flow con todas sus municiones. La banda liderada por Jared Leto hizo todo lo posible para que sus admiradores no olvidaran jamás este concierto. Apenas empezó la función, el vocalista, invitó a 3 personas del público a que se subieran al escenario con la excusa de que bailaran con él. Hizo poguear a toda la multitud de gente que los estaba escuchando, mientras en el escenario se veía un show increíble de luces, humo y fuegos artificiales. Además de que nos sorprendió a todos cuando invitó a Pato Sardelli, de Airbag, a tocar la guitarra con ellos. En resumen un artista y, por sobre todo, un showman con todas las letras.
En el Alternative estaban quienes optaron por algo más urbano en ese horario, y se fueron a verlo a Bhavi, quien llevó de invitado a Tiago Pzk para interpretar “Mi ciudad” junto a él, luego de cantar algunos otros temas del disco que sacó en conjunto con su amigo Ysy A “Tu dúo favorito”. Además anunció la salida de “Bésame Remix” para el 11 de Abril.
Finalmente la hora que todos estaban esperando llegó y el predio entero enloqueció cuando salió Limp Bizkit a escena. No había una sola persona que no estuviera moviendo alguna parte de su cuerpo al ritmo de su música. La banda no paró de incitar a sus fanáticos a que armen los pogos más grandes de todo el fin de semana y ellos, obviamente, obedecieron sin chistar. Fue tanta la euforia que tenía la gente que hubo un momento en el que se sobrepasaron un poco los límites y tuvieron que parar el show unos minutos y pedir que se retroceda unos pasos para poder circular y sacar a la gente que se había desmayado o se encontraba lastimada.
Al terminar, el público se dividió entre los que iban a ver a Feid y los que iban a ver a King gizzard & the lizard wizard. Sin discusión la gran mayoría optó por el show del “Ferxxo” quien los pondría en un mood más reggaetonero. El show comenzó con luces en el cielo, sincronizadas por drones que se movían y formaban distintas figuras. Algo que pudimos destacar de Feid es que si que sabe llamar la atención, todos se encontraban embobados viendo como las figuras en el cielo cambiaban. La tela que cubría el escenario cayó y aparecieron fuegos artificiales mientras Feid comenzaba su presentación.
En cuanto a King gizzard & the lizard wizard, la banda optó por un show no tan llamativo a niveles visuales pero sí sonoros. Rock psicodélico, distorsión en las voces y solos de guitarras larguísimos fueron algunos de los condimentos que más se destacaron en su presentación.
Por último, la cereza del postre, Meduza cerrando finalmente estos 3 días de pura música en el escenario principal. Apenas se encendieron las pantallas, toda la gente que quedaba todavía en el hipódromo fue corriendo hacia la valla del Samsung para seguir bailando y terminar de inmortalizar este fin de semana en sus recuerdos.
Crónica y foto por : Florencia Sosa